En el ámbito de la comunicación se debe diferenciar los datos de la información.
- Los datos son elementos de conocimiento o representación simbólica (números, letras, algoritmos, etc.) que no tienen un significado por sí mismas si están fuera de contexto.
- En cambio, la información es un conjunto de datos estructurados, elaboradas o procesadas de manera que tienen un significado para alguien en un momento y lugar determinados.
Los datos se pueden procesar (asociar, combinar y agrupar) de modo que, en un contexto determinado, pueden convertirse en información, es decir, pueden proporcionar un significado y un mensaje útil para su receptor.
La información es un conjunto de datos que estructuradas u ordenadas en un determinado contexto transmiten un significado, favorecen el conocimiento y permiten resolver problemas o tomar decisiones.
Los informes sirven para convertir los datos en información, pero a veces no es suficiente y hay que ir más allá; por ejemplo, combinando, trabajando y analizando la información se pueden conseguir conocimientos que pueden servir, de manera directa o indirecta, para la toma de decisiones. El análisis de datos comerciales permite, entre otros, descubrir oportunidades de mercado o averiguar cuáles son los motivos por los que no se consigue la fidelidad de los clientes.
La información comercial es uno de los activos más importantes de los que puede disponer una empresa, por lo que la inversión en herramientas y el tiempo dedicado a la gestión de los datos de los clientes y de los clientes potenciales se transforma rápidamente en competitividad y en buenos resultados de ventas.
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